Sacar filo a los cuchillos del hogar ahora es más práctico y sencillo con el afilador CU 7000 Orbegozo. Es hora de sustituir otros afiladores que hacía de esta labor un asunto agotador y peligroso, para adaptarnos a la nueva tecnología ponemos a tu disposición.
Con este afilador podrás dar mayor vida a tus cuchillos, tijeras y diferentes herramientas. La adaptación de este afilador es total, contando con un sistema de dos etapas para toda clase de hojas no cerradas. Este dispositivo cuenta con la calidad y funcionalidad característica de los productos Orbegozo.
Este eficaz equipo del catálogo Orbegozo cuenta con ventosas añadidas, para una mayor estabilidad y seguridad. No se necesitan mayores indicaciones. Solo encenderemos el afilador y colocaremos nuestro utensilio en la ranura correspondiente. Afilar hojas nunca fue tan sencillo, rápido y sobre todo, seguro. Guardarlo también será fácil, debido a su recoge cable automático.
Afilador de cuchillos eléctrico.
Potencia 60W.
Sistema de afilado de piedra de 2 etapas para cualquier hoja no serrada (excepto cuchillos cerámicos).
Las cuchillas, tenedores y otros utensilios afilados deben ser manejados con cuidado para evitar cortes. Mantenga siempre la cubertería fuera del alcance de los niños.
Use la cubertería únicamente para los fines para los que fue diseñada (comer, cortar, etc.). No la utilice como herramientas para abrir envases o como palancas, ya que esto puede dañarlos o causar lesiones.
No use cubiertos de metal para manipular alimentos directamente en fuentes de calor, como sartenes calientes o platos recién salidos del horno, ya que pueden calentarse y causar quemaduras.
Lave la cubertería inmediatamente después de su uso para evitar que los restos de alimentos se adhieran o se oxiden. Use detergentes suaves y un paño de limpieza no abrasivo para evitar daños.
No exponga la cubertería a productos de limpieza corrosivos ni a soluciones que puedan dañar su acabado o causar reacciones con los materiales de la cubertería.
Para los utensilios de madera, evite dejarlos en remojo en agua durante períodos prolongados, ya que esto puede deformarlos o dañarlos. Lávelos a mano y séquelos inmediatamente después de su uso.
Si la cubertería es de metal, no debe usarse en el microondas o en el horno, ya que puede causar chispas o daños a los electrodomésticos.